Las tiendas “pop-up”, es la última tendencia en establecimientos comerciales. En un intento de combatir la saturación publicitaria, las grandes compañías se apuntan cada vez más a la moda de las tiendas temporales o “pop-up”, una idea innovadora que convierte a los comercios en anuncios en tres dimensiones.

Las tiendas “pop-up” son tiendas que se instalan en las mejores zonas comerciales de una ciudad, con una fuerte inversión en diseño y publicidad, pero que cierran sus puertas en un corto periodo de tiempo, en días o incluso semanas. “Si los productos de moda van y vienen, ¿por qué no puede pasar lo mismo con las tiendas?”, se pregunta la agencia Trendwatching.com en un artículo sobre el auge de este tipo de manifestaciones comerciales.

Para Wendy Liebmann, presidenta de WSL Strategic Retail, “las tiendas pop-up son lo último en el marketing de guerrilla”, como se denominan a las campañas promocionales que se realizan desde la realidad del consumidor, es decir, teniendo en cuenta su presupuesto, su entorno y sus gustos.

Según los expertos, la idea de las tiendas “pop-up” nació en Londres, hace tres años, pero es en Nueva York donde se han producido más experiencias de este tipo, si bien ahora ya se ven en varias ciudades del mundo. Lejos de buscar la rentabilidad en su corto espacio de vida, estas tiendas temporales están ideadas para impactar en el público, en el lanzamiento de una empresa o de unas líneas de productos.

El último ejemplo, la multinacional Kodak, que acaba de abrió una tienda “pop-up” en el centro del Soho neoyorquino, con el único objeto de dar a conocer su clara apuesta por el mundo digital. Más que una tienda, fue un centro de experimentación, un lugar donde la gente puede entrar para experimentar con sus productos, y conocer todos los nuevos servicios digitales que ofrece a través de kodakgallery.com.

Este elemento de temporalidad y sorpresa ha sido utilizado por compañías de todo tipo en los últimos dos años, desde las aerolíneas de vuelos baratos Song y EasyJet, que las utilizaron para darse a conocer, a la empresa de comida para mascotas Meow Mix, que creó un bar para gatos en el centro de Manhattan.

Otro ejemplo de esta idea es la empresa italiana de café Illy, que mantuvo abierto un par de meses en el Soho neoyorquino, un gran espacio en el que ofrecía exposiciones, talleres y libros, además de café expreso y capuchinos, con el único objetivo de hacer que la gente asocie su marca con la cultura y el arte de alto nivel.

A ella se han unido otras muchas en los últimos meses, como MTV, Sony, Ericsson, o Adidas. “Pero las tiendas pop-up no sólo sirven para dar a conocer un producto o una nueva línea de negocio. Este concepto de tienda sirve para mucho más”, asegura Kevin Appelbaum, socio de la consultora Hawk Hill, en la revista “Retail Traffic”

“Nosotros vemos que estas tiendas sirven también para conseguir información de los clientes”, asegura Appelbaum, que actualmente trabaja en el lanzamiento de seis tiendas “pop up” para diferentes empresas, cuyo objeto será la investigación de mercado, no la promoción de productos.

Enlace recomendado: http://www.openpop-upshops.com

Fuente: www.noticiasdot.com – http://1buenaidea.com